Seré cada año más joven si soy cada día más libre. La libertad es
síntoma de juventud. No debemos empeñarnos en meter a Dios en el tiempo, sino
en salir nosotros de él. Soy la ola que aun no se ha dado cuenta de que es
océano. El tiempo en el que se desarrolla nuestra existencia tiene mucha
importancia, porque se trata nada menos que de una vida digna para emigrantes y
refugiados y una felicidad para todos y todas. La
vida, supremo valor, la estamos haciendo insoportable para la mayor parte de la
humanidad
Eso es definitivo. Nuestra reflexión de hoy tiene que estar encaminada a
descubrir qué estoy haciendo yo con mi tiempo, cuál es mi compromiso en la vida.
Puedo estar malgastando o perdiendo lo que se me ha dado para que lo aproveche,
o, mucho mejor, ya lo estoy aprovechando de verdad. Van pasando mis años y con
ellos las oportunidades de dar verdadero sentido a mi vida. Esta tiene que ser
mi preocupación cuando estamos pasando de un año a otro.
Os deseo un feliz año 2018.