viernes, 9 de noviembre de 2012

Ética y moral, dos conceptos distintos

PRECISIÓN CONCEPTUAL: ÉTICA Y MORAL
José María García-Mauriño
13 de Enero de 2004


1.- Por qué esta distinción: ¿dónde está el problema? ¿Qué es ética? ¿Qué es moral? ¿Son lo mismo o hay que hacer distinciones entre ellas? Hay mucha confusión acerca de estas cosas. Y esto crea muchos problemas. Significa entre otras cosas que el sistema tiene interés en que esto quede confuso. Ya diremos el porqué de este interés. En el lenguaje ordinario ética y moral se emplean indistintamente, como si fueran sinónimos. Se entiende lo mismo al decir “aquí hay un problema ético” que cuando se dice “aquí hay un problema moral”. ¿Qué es lo que hay por dentro? Que al equiparar uno y otro, que la ética y la moral están en el mismo nivel, estamos haciendo un juicio de valor sobre algunas acciones de tipo personal, o de alcance social: esa acción, esa conducta, esa decisión, es buena o es mala o es dudosa. ¿Qué queremos decir cuando decimos “esto es una inmoralidad”, al ver una propaganda de tipo erótico o pornográfico, o unos modelos de vestir de algunas mujeres, más que de hombres? Y si es una acción política, ¿es moral alcanzar un escaño en el parlamento por influencias de partidos? ¿O hacerse millonario con especulaciones inmobiliarias? ¿Eso es bueno. es malo, es dudoso o es indiferente.? ¿Qué queremos decir al hablar de que una persona que ha sufrido una depresión por la muerte de un familiar, o un estudiante que ha suspendido, o que ha tenido un desengaño amoroso, están muy bajos de moral? ¿Es correcta la expresión de que vaya un general al campo de batalla a levantar la moral de las tropas? ¿Qué tienen que ver los estados de ánimo con la moral? ¿Es lo mismo decir que hoy día hay una enorme falta de ética? ¿Que a la política le falta ética?. ¿Que los negocios se realizan sin ninguna clase de ética? ¿O lo que falta en la sociedad de hoy es la moral? ¿Por qué hay tanto debate en educación sobre las clases de ética como sustituto se la religión? ¿Son equiparables ética y religión? Si profundizamos un poco podemos ver que ética y moral no son lo mismo. En la sociedad, los que están en el poder, la clase dominante, nos inducen a pensar que son más o menos lo mismo Nos imponen una única forma de pensar, sentir y valorar. Según ese pensamiento decimos que es Bueno a lo que ellos dicen que es bueno. Y decimos que es Malo o que no está bien, a lo que ellos dictaminan que es Malo o que no está bien. ¿Cuándo se puede decir que una persona es ética, o cuando es moral? ¿Cuáles son la ética y la moral vigentes hoy? El problema que decía al principio consiste en que hacerse estas preguntas nos hace pensar y nos hace valorar las cosas de distinta manera. Porque se trata nada menos que saber discernir de alguna manera lo que es Bueno y lo que es Malo. Son dos niveles distintos, uno es el ético y el otro es el moral, son dos maneras distintas de pensar y valorar las cosas y personas Y vuelvo a preguntar, para ser feliz, ¿hay que ser ético o moral? ¿Con qué código, norma u orientación, trato de orientar mi vida, con la normativa que me imponen, o con el sistema de valores que yo elijo y elaboro por mí mismo?

2.- El ámbito de lo moral: A) Lo moral se refiere siempre al campo de la conducta, de las acciones: lo que se hace cada día, en cada institución (familiar, parlamento, economía, etc.), regido por códigos concretos de conducta de tipo religioso o civil. . Se trata de las costumbres vigentes en la sociedad, regidas por unas normas que emanan de la misma sociedad sin saber a punto fijo quien o de dónde han salido esas normas concretas, de tipo familiar, o social o económico o político. Responde a lo que todo el mundo hace, a los comportamientos diarios de la gente, que ordinariamente se rigen por los deberes u obligaciones impuestas por la sociedad civil o religiosa.  B) Prescribe lo inmediato para la acción, dictado por el orden establecido por los poderes sociales, políticos o económicos. La Globalización, el Mercado. C) Es lo sancionado por la costumbre, por las normas sociales establecidas, por lo de siempre, por lo que se ha hecho toda la vida..Y eso es lo Bueno, el salirse de esa normativa, de esas costumbre, se considera Malo o peligroso. D) Algunas preguntas: - ¿Por qué algunos estiman que es inmoral vivir juntos sin estar casados? - ¿Por qué se considera que es inmoral las parejas de hecho de homosexuales? - ¿Es moral el inmovilismo, la sumisión mental, la aceptación pasiva de leyes, normas y precios que nos imponen? - ¿Es moral hacerle el juego a las fabulosas inversiones futboleras y ver partidos? - ¿Es moral jugar dinero en la Bolsa? - ¿Es moral el aumento alarmante en gastos de cosmética, perfumería y estética? -¿Es moral comprar en las rebajas sin verdadera necesidad? -¿Es moral gastarse el 40 % de los ingresos en estas Navidades? -¿Es moral seguir comprando una serie de productos con los que las multinacionales financian las armas, el narcotráfico y la prostitución? -¿Es moral buscar sobre todo la seguridad por encima de la Libertad? -¿Es moral dejarse “convencer” por los programa de la TV sin hacer un esfuerzo de crítica, de querer saber por qué dicen eso o hacen esa publicidad? - ¿Es moral ir a votar en unas elecciones sin estar convencido de lo que se vota y de las consecuencias políticas que puede tener para el país? - ¿Es moral acostumbrarse a conocer el hambre que hay en el mundo, el aumento del gasto en armamento, las muertes por sida, etc. y no sentirse responsables? -¿Somos personas morales o éticas? Todas estas preguntas tienen una respuesta común: Sí, son morales, Pero no son éticas. Son morales porque responden a códigos de conducta impuestos por el sistema capitalista, pero no se basan en valores éticos. Desde el punto de vista jurídico no se pueden hacer distinciones de homosexuales y heterosexuales. Todos somos iguales ante la Ley, es decir, un reconocimiento en los mismos términos para las parejas homosexuales que para las heterosexuales. Un código moral o religioso no puede ser nunca un límite en una sociedad democrática. Su tarea no es hacer que todos sean iguales, sino que cada uno tenga derecho a ser diferente, es decir, a tener un proyecto de vida personal, a ser el que quiera ser. Una diferenciación de este tipo entre homosexuales y heterosexuales no sería nunca una diferenciación, sino una discriminación.

3.- El ámbito de lo ético La ética es parte de la filosofía. Considera concepciones de fondo, principios, normas y valores que orientan la conducta de personas y sociedades. Una persona es ética cuando se orienta por principios y convicciones. Decimos entonces que tiene carácter y buen talante. La moral forma parte de la vida concreta. Trata de la práctica real de las personas que se expresan por costumbres, hábitos y valores aceptados. Una persona es moral cuando obra conforme a las costumbres y valores establecidos por la sociedad que, eventualmente, pueden ser cuestionados por la ética. Una persona puede ser moral (sigue las costumbres) pero no necesariamente ética (obedece a principios). Todas las éticas han nacido de la reflexión humana del ethos (carácter, hábito, costumbre), que es de naturaleza universal. El ethos configura la actitud de responsabilidad y cuidado ante la vida, la convivencia social, la preservación de la Tierra. Lo que buscamos ahora es un ethos que sea adecuado a la plataforma de la historia, que es global y planetaria. Problemas globales, éticas globales. ¿A qué llamamos ética? Todos sabemos que proviene de la palabra griega ethos, que además de significar costumbres, comportamientos, tiene el significado de "morada". Es decir, el abrigo permanente de los animales, (establo) o de los seres humanos (casa). Los seres humanos delimitan su parcela y construyen su morada en la naturaleza, la madre Tierra. Y la madre naturaleza se llama en griego physis (fisis), que suena a física, algo tangible, material. Quiere decir que la morada le hace echar raíces en la realidad material, física, que le da seguridad y le hace sentirse bien en el mundo. Esta morada no viene ya dada de antemano, sino que debe de ser construida día a día mediante la actividad humana. Esta es la obra de la cultura. Es decir, el ethos no es una realidad acabada. La naturaleza humana lo mismo que el universo no es algo ya hecho y terminado de una vez por todas, sino que es una realidad que siempre se está haciendo. Entonces, es cuando ya podemos traducir ethos por ética. Y en este contexto parece como que se da una cierta identidad entre naturaleza, como la madre Tierra, y la naturaleza como sinónimo de naturaleza humana. ¿Son dos cosas tan distintas que las podamos separar? 1) La Ética es como una mesa de seis patas: la mesa significa la igualdad de todo Ser Humano (SH) y las 6 patas son los 6 valores básicos y universales: la Vida, el Amor, la Libertad, la Justicia, la Verdad, la Solidaridad 2) La ética es vida, es el arte de vivir, y la Vida es movimiento, no inmovilismo (sobre todo el mental, y eso de “acostumbrarse a lo de siempre”), es un rechazo a estar muertos en vida (el cadáver no se mueve), es moverse, querer participar en la realidad de la vida diaria, en el entorno diario de la familia, trabajo, amistades, del barrio, de la ciudad, de la polis, la Política. 3) La ética no responde sólo a la pregunta ¿qué debo hacer?, sino ¿por qué debo hacer esto o lo otro? ¿Cuáles son la ética y la moral vigentes hoy? Las del capitalismo. Su ética dice: bueno es lo que permite acumular más con menos inversión y en el menor tiempo posible. Su moral concreta se expresa así: emplear la menor cantidad de gente posible, pagar menos salarios e impuestos y explotar mejor la naturaleza. 4) La ética no se rige por normas, leyes o códigos, venidos de fuera, sino que parte de una elección y elaboración de principios, normas y valores que cada cual va eligiendo a lo largo de su vida y con los cuales orienta su comportamiento. . Puede ser que esa elección coincida con las normas vigentes (leyes y normas de tráfico, por ejemplo) o puede ser que no coincidan. No se trata de rechazar lo que viene de fuera, sino de ser autónomos, es decir, de darse cada uno sus propias leyes y normas. Es el paso de la ley impuesta a la libertad de conciencia. Es el ejercicio de la Libertad. 5) La ética actual es una Ética Global: no bastan las éticas personalistas, individualistas, de hasta ahora. Estas se suponen, pero hay que darles un contenido mucho más amplio. A problemas globales, respuestas globales. El mundo está en crisis. Se puede decir que la Globalización económica y financiera no tiene ética, sí tiene poder económico y financiero, mucho más que político. El mundo es único, o no hay mundo. No hay dos o tres mundos, hay un solo mundo. No el Primero, Segundo, Tercer Mundo y hasta Cuarto Mundo. ¿Cuántos mundos? ¿Por qué tanta división, porqué tanto interés en dividirnos? Esto es síntoma de una crisis muy seria: la crisis social, la crisis del sistema de trabajo, la crisis ecológica Debemos reconocer que la Globalización económica y financiera todavía no ha dado respuesta a los grandes desafíos de la sociedad, como la pobreza, el sida y un sinfín de otros males socioeconómicos. Sus planteamientos no pueden ofrecer soluciones, porque no tienen valores éticos, humanitarios. Lo que les preocupa es ese acaparamiento de la riqueza y de los medios tecnificados, de una mano de obra cada vez más reducida y peor pagada, unas grandes máquinas contables que distribuyen esa riqueza como les conviene, llamadas Fondo Monetario Internacional, Banco Mundial, Organización Mundial del Comercio, y que a todo ello se le sigue llamando Globalización económica y financiera.

4.- Relación entre la moral y la religión: Se podrían hacer estas preguntas: - ¿La moral es parte de la religión, o es la religión una parte de la moral? - ¿cuál es la diferencia entre religión y moral? Porque una cosa es la vivencia moral y otra distinta es la vivencia religiosa. ¿Se puede ser moral sin ser religioso?. - ¿es lo mismo ser religioso que tener fe? - ¿cuál es la diferencia entre religión y fe? - ¿cuál es la diferencia entre moral y fe? - ¿Cuál es la exigencia de la moral cuando se vive desde la fe?. Solamente una precisión más: ¿Es la moral religiosa una perversión de la ética? Con este enunciado quiero decir que una moral que tiene su origen y fundamento en una religión basada en la ley, altera y trastorna completamente el sentido de la ética. Entendiendo por ética un conjunto de principios y valores que se da el sujeto a sí mismo para orientar la conducta de su vida. Ordinariamente, hasta ahora, la religión ha impuesto unas determinadas normas y obligaciones para entenderse con Dios (por ejemplo, en las confesiones, en las liturgias, en las Misas, y en todos los sacramentos: son las obras de la Ley). En este sentido la religión tiene un poder y un saber. Un poder político y económico. Y un saber teológico-moral, que es otra clase de poder. El saber moral ejerce un dominio sobre las conciencias, impone normas, preceptos y leyes que hay que cumplir bajo la pena de pecado o de excomunión (por ejemplo, el aborto, el suicidio, el divorcio, la eutanasia). El que domina es el que está arriba, el que se somete está debajo. El que sabe de estas cosas se siente superior a los que no saben. Una religión, cuyo centro es la ley y no el amor, conduce y empuja de manera irremediable a entender y experimentar a Dios como juez que lleva cuenta minuciosa de lo que cada uno hace o deja de hacer. Un Dios que premia y castiga según la ley. La ley viene de Dios. Premia al que es observante de la ley y castiga al infractor de las leyes, sean los mandamientos de la ley de Dios o de la Iglesia, o las normas del Derecho Canónico. Una religión y una moral que no se definen a partir de la vida y del amor, sino a partir de la retribución, no puede ser la religión de Jesús de Nazaret. A) Y hablo de perversión ética en el sentido de "perturbar o alterar el estado de las cosas" . ¿En qué consiste esa perversión, esa alteración de la naturaleza de las cosas? En que la moral, para ser auténtica, tendría que ser autónoma. Y no lo es, porque de hecho se vive una moral heterónoma. Una moral basada No en la libre autodeterminación del sujeto, sino en la fuerza que da la autoridad de donde provienen las leyes. Una moral basada en la religión y una religión centrada en la observancia de la ley, produce efectos alienantes. Los que asumen esa clase de religión, asumen ese tipo de moral. B) Esta perversión es lo que aparece en la parábola del fariseo y el publicano (Lc.18,9). Ahí se retrata al personaje que se basa en ese tipo de religión, es decir, que tiene el convencimiento de estar cerca de Dios. Y produce tres efectos claros: seguridad en sí mismos, convicción de su superioridad y desprecio hacia los que viven de manera distinta. El individuo se siente seguro, tan seguro que no hay quien le haga dudar ni cambiar sus propias ideas. A todas horas se empeñan en llevar razón. Ni menos aún duda de su conducta que considera irreprochable. Se siente superior a los demás, porque ve claramente que su vida y sus obras responden a como tienen que ser las cosas. Y desprecia, con mayor o menor intensidad, a todos los que no entienden la vida y las costumbres como él la entiende. Es una alienación en toda regla. Una persona que configura así su religión y su moral es una persona más o menos incapacitada para amar. Es el trastorno más básico de la ética como tarea humana de autoconstrucción progresiva, una vida humana que debería estar relacionada por amor con otros seres humanos, y no con la prepotencia del que tiene la ley en su mano. El orgullo ético es todo lo contrario a sentirse débiles, pobres, llenos de faltas y errores. Es lo propio de un creyente humilde, reconocerse débil La experiencia vital de la debilidad, le hace a una persona estar más cerca de la realidad, que la que tiene una postura de orgullo y prepotencia. La experiencia viva de la debilidad es el punto de encuentro con el Dios de los débiles, con Jesús de Nazaret. Ninguna persona está por encima de otra persona ni es quien para juzgarla. Tampoco ninguna persona debe sentirse por debajo de ninguna otra. En el terreno de la ética nos colocamos todos en un plano de igualdad total. Comprendo que para muchas personas les sea muy difícil separar en la práctica de cada día la moral de la religión. Es una experiencia viva que durante muchos años se ha hecho carne y sangre, casi consustancial con su manera de vivir. No es nada fácil desprenderse de este modo de entender la moral. Resumiendo lo que he dicho, se puede decir tres cosas: • que no es lo mismo ética que moral y hay que saber distinguir, • que esta distinción nos complica la vida, nos obliga a pensar de forma autónoma sin dejarse llevar por lo de siempre: que el sistema no quiere que pensemos, que ya él piensa por nosotros • que la moral religiosa, como hasta ahora se ha observado, es alienante. ---oOo---

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